Para comenzar, debemos aclarar que un masaje erótico, aunque cualquiera pueda aprender a ejecutarlo, no son simples masajes cualquieras. Dentro de esta técnica, es necesario involucrar todos los sentidos del individuo y, al mismo tiempo, estimular su erotismo y relajación. Estas terapias son, sin lugar a duda, la mejor forma de pasar un día alejado de lo común y concentrarse en la majestuosidad de las manos de quien lo realiza. De igual manera, estos son la clave de la entrada en confianza con su pareja y con su propio cuerpo.
Los masajes eróticos pueden ser un increíble comienzo, siendo considerados como parte de un juego previo, en algunos casos se puede usar aceite, tocando y aplicando la presión justa en las zonas erógenas cualquier individuo podrá relajarse y disfrutar la terapia. Esta técnica es una alternativa que permite mejorar la vida sexual en una pareja, su objetivo principal es despertar los sentidos e incentivar el deseo, esto se obtiene por medio de movimientos lentos y apropiados.
De igual manera, dentro de esta técnica existen diversos estilos que se pueden aplicar, cada uno de ellos siendo especializado para los individuos y permitiéndoles relajarse y aumentar su deseo. El amasamiento, ondulatorio, ventosa e incluso pequeños golpes, forman parte de un masaje erótico. Sin embargo, no se debe apreciar dicha terapia simplemente como una herramienta sexual, debido a que incluye distintas aplicaciones, mejorando la salud general y aportando distintos beneficios.
- Relajación de músculos, piel y mente: aplicando movimiento suaves y lentos, se logra reducir el estrés y la tensión existente. Disminuyendo los nervios y relajando las extremidades, es una práctica que debe ser ejecutada de vez en cuando.
- Olvidarse de los problemas: habiendo teniendo un día pesado o larga jornada laboral, esta terapia es de gran ayuda para aliviar las preocupaciones. Al mismo tiempo, aporta un espacio temporal en donde el individuo es el protagonista.
- Estimulación de los sentidos: no solamente logra despertar el erotismo, que algunas veces se encuentra escondido o dormido, sino también favorece a la creatividad. Mediante sensaciones nuevas, se descubre zonas erógenas, las cuales disfrutan ser estimuladas.
- Favorece la autoestima: el individuo que recibe el masaje erótico se siente deseado. Esto aumenta el aprecio que tiene por sí mismo.
- Mejora la circulación: en las zonas masajeadas se logra obtener una mejor circulación por medio de los receptores musculares.